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viernes, 26 de agosto de 2011

EL ROL DE LA CULTURA EN LA ESTRATEGIA ORGANIZACIONAL.


La estrategia de una organización establece el conjunto de patrones de decisión y acción que ésta adopta con la finalidad de procurar ventajas competitivas sostenibles. Estos patrones, así como los procesos de pensamiento y análisis que llevan a su génesis, son determinados por la forma en que la organización interpreta su mundo; por sus percepciones y supuestos respecto del ambiente que la rodea; por la forma en que traduce y da significado a las condiciones, tendencias y movimientos que caracterizan la dinámica de las fuerzas competitivas que interactúan en ese ambiente. 
Como vemos, la estrategia se fundamenta sobre un mapa que representa, simplemente, una percepción y una codificación del entorno. Un mapa que existe y se sustenta sobre el conjunto de creencias, valores, paradigmas, modelos de pensamiento, estilos de actuación y normas implícitas que subyacen en el inconsciente colectivo de la organización como ente vivo, como una gran mente unificada que ve, escucha, percibe e interpreta su mundo – tanto a lo interno como a lo externo – y que, sobre la base de esta interpretación, crea una realidad para sí misma, una realidad para la cual y dentro de la cual actúa, vive, evoluciona, se adapta.
Y ese conjunto de elementos antes mencionado es lo que llamamos cultura organizacional. La cultura – tantas veces tomada a la ligera y vista como un simple elemento “soft”, más bien ligado a lo subjetivo e intangible – constituye, pues, la base más profunda de donde emanan los patrones de actuación de una organización. 
Este conjunto de “intangibles” es el determinante de la calidad del pensamiento, de las interpretaciones y de los modelos de la organización; y son estos modelos e interpretaciones los que derivan en decisiones y acciones y, por lo tanto, en resultados tangibles. De la calidad de estos resultados depende el éxito o fracaso de la organización, empresa, institución o grupo.
En otras palabras, la calidad de la cultura organizacional determinará la calidad de las estrategias de una organización y, por lo tanto, la calidad de sus resultados y su éxito – o fracaso – competitivo.